jueves, 15 de marzo de 2012

charla 4

Innovar, una ilusión en equipo.

Dori Oliver es la directora del colegio Gabriel Miró de Alicante. Tiene unos 12 años de experiencia en equipos directivos.

Vino con el propósito de enseñarnos a poner los pies en el suelo y que viéramos las cosas buenas y malas que nos íbamos a encontrar en un centro y cómo podíamos ayudar a innovar. Hizo mucho hincapié en que innovar no es sólo en tecnología (eso es sólo una parte), sino sobre todo en ideas.

Empezó haciéndonos unas preguntas para ver primero nuestras ideas y a partir de ellas empezar y enfocar la charla de una forma u otra. Las conclusiones que obtuvimos de nuestras respuestas fueron más o menos:

1º) La creatividad es la base para innovar. Si no intentas crear algo nuevo, no puedes innovar.

2º) Lo que nos asusta al enfrentarnos a la hora de trabajar es no hacerlo bien, no saber aplicar todo lo que hemos aprendido…

3º) Lo que realmente hace que se innove en un centro son todas las ideas en conjunto. Lo de uno sólo, sirve para una única parcela. Cuando juntamos las ideas de todos tenemos las suficientes ideas como para llevarlas a la práctica. Si no somos capaces de crear un equipo para que todo pueda fluir, no vamos a conseguir nada.

4º) La figura del director de un centro no es lo que hace que funcione, sino que es la máquina que va a hacer que todo el conjunto funcione.

Por tanto, haciendo honor al título de la charla, innovar es una ilusión en quipo. Si no nos juntamos para hacer algo, lo que hagamos de forma individual puede ser maravilloso, pero no se queda más que en una sola faceta, llegará a muy poquitos y lo que pretendemos es que sea toda la comunidad educativa la que se beneficie de las cosas.

Esto no es nuevo para nosotros; ya lo hemos visto en muchos otros sitios; cuando estuvimos hablando de la formación permanente y visitamos diferentes páginas que ofrecían formación y recursos, una de las condiciones era que los recursos que tú crearas para aprender, se los cedieras a la página para que todos pudiesen aprovecharla.

Si queremos innovar, necesitamos el jarabe que lo cura todo; la ilusión. Sin ilusión pocas cosas se pueden hacer. Pero esa ilusión no solo tienes que tenerla tú, sino que tienes que transmitírsela a tu equipo. Es una labor de quipo: “con manos diferentes vamos a formar ese quipo que va a llevar a cabo las cosas”. Yo tengo que innovar permanentemente, pero si no consigo que los que están a mi alrededor sean innovadores y tengan ganas de hacer cosas nuevas, vamos a conseguir muy poco. Innovar significa hacer algo nuevo y novedoso, pero siempre encaminado a mejorar algo. Los profesores tenemos que pretender mejorar el día a día de los niños.

Yo pienso que es muy importante saber transmitir esa ilusión, casi tanto como innovar, porque si se va a intentar innovar y los profesores, los alumnos… lo van a hacer como un deber, como una losa, algo “que hay que hacer”, es preferible no hacerlo. Hay que contagiar “ese gusanillo” y esas ganas para que entre todos se pueda lograr. Por mucho que alguien tire de un carro, éste no va a andar si no tiene ruedas.

Me encantó el símil sobre la innovación, que tiene que hacerse de forma parecida a las olas de la playa. Es algo que no para, no es algo brusco que rompe lo que había, sino que va llevando con tranquilidad y sin parar, cosas que van modificando la playa sin que apenas nos demos cuenta.

Por eso, ella intentó, poco a poco, romper la dinámica de que cada profesor viviese en su aula y que las cosas se compartieran con toda la comunidad educativa. Al principio cuesta porque es más fácil seguir con lo que conoces que enfrentarse al miedo de lo desconocido, pero al final, todos terminan, en mayor o menor forma, participando e incorporándose a estos proyectos.

Lo primero que hizo Dori cuando llegó a la dirección del centro fue plantearse quién era ella, qué quería conseguir, y que ella tenía que ser la primera  y la última para todo. No puede pedirle a alguien cosas que ella misma no haga, pero también tiene que hacerse un poco para atrás para dejar que los demás caminen; no puedes darle todo hecho porque mermas su creatividad y termina siendo una imposición.

Ya nos han explicado en varias de las charlas que, a la hora de innovar, algo muy importante que hay que hacer antes de ponerse “manos a la obra”, es hacerse muchas preguntas y plantearse las cosas, saber qué quieres exactamente y cuál es la mejor forma de conseguirlo.

A la hora de plantearse qué proyectos quería llevar a la práctica, también tuvo que analizar ciertas cosas, ciertos recursos, como:

  • La realidad del centro, porque no puedes hacer cosas sin contar con esa realidad. No puedes celebrar un festival en un salón de actos si no tienes salón de actos. Tienes que ser realista.
  • La riqueza humana; nos explicó que un centro todos tienen su importancia y todos valen igual, desde la limpiadora hasta la dirección. Si no creas una comunidad educativa en la que todo el mundo se sienta integrado y donde todos se sientan que son importantes dentro de su parcela, es muy difícil hacer cosas con un objetivo común y con la participación de todos.
  • El alumnado. Tienes que saber cómo va a responder ante las propuestas.
  • Colaboración familiar. El trato con los padres es muy directo, especialmente en la etapa de infantil. Los padres tienen necesidad de comunicación con los profesores. En esta relación, la forma de comunicar las cosas es muy importante; nunca hay que usar un no lo sé, ni hablar de forma negativa. Hay que hablar de forma que obtengan una explicación lógica y los padres se queden tranquilos. La autoridad de un profesor no se la puede saltar un director, por muy director que sea, algo que me parece muy importante recalcar. Hay que seguir un protocolo en las situaciones de comunicación con los padres.
  • Los recursos externos. Hay que buscar mucho y llamar a todas las puertas posibles. Hay que buscar recursos y sacarlos de cualquier parte.


Pero un director, para poder llevar a la práctica todas sus ideas, necesita el respaldo de un buen quipo, porque no puede hacer las cosas individualmente, primero porque no puede cargar con ese peso él sólo y, segundo, porque se estaría contradiciendo con el espíritu de compañerismo que hemos dicho que debe acompañar a la innovación.

Un buen equipo en el sentido de que sea un quipo que de confianza de que están ahí para servir a la comunidad; que tengan planteamientos comunes, pero también diferentes para tener muchos puntos de vista y alguien que te refrene y te diga los fallos y las carencias de tus propuestas para ver si realmente se pueden llevar a la práctica, (esto lo vimos en una clase con Alicia, ¿os acordáis?); tiene que ser representativo; dinámico, agilizar las cosas; tienen que estar ilusionado y ser ilusionante, que transmita esa ilusión a los demás; y sobre todo tienen que ser personas responsables.

En el Gabriel Miró cada año se plantean un proyecto nuevo. Lo proyectos tienen cinco puntos importantes para poder llevarlos a cabo. Para crear algo nuevo, lo primero es querer, tener esa ilusión y ese motor de querer innovar, pero me tengo que plantear si puedo, por lo tanto me tengo que plantear todos los recursos que hemos dicho antes (el espacio, las personas, los alumnos…), ¿es viable el proyecto? Luego tenemos que saber hacerlo, por lo tanto tenemos que formarnos y prepararnos para hacerlo y buscar la información de donde sea necesaria. Una vez que sepamos llevarlo a la práctica, hay que crearlo, pero para eso hay que organizarse, porque no lo puede crear una sola persona y luego darlo; si no se hace en conjunto y organizados, no se vivencia y no sirve para nada. Por último, es muy importante legarlo; si no lo compartes, si no sirve para que lo usen otros, es un esfuerzo inútil. Tiene que tener una finalidad común.

La base para cualquier proyecto innovador son la motivación y la positividad, por muy desastroso que pueda parecernos. “Todo lo que dependa de nosotros tiene que seguir adelante, y el resto, ya llegará; y cuando llegue, nosotros ya habremos avanzado camino”. Tienes que levantarte todos los días con esa ilusión y con esas ganas. Hay que tener muy en cuenta los pequeños logros para mirar siempre en positivo. Hay que tener mucho cuidado con el estrés. De vez en cuando hay que parar porque si estás con muchas cosas a la vez, no puedes atender bien a cada cosa. Hay que aprender a tener varios frentes abiertos pero hacerles cara de uno en uno; sin prisa pero sin pausa. Eliminar la negatividad. Lo más importante es la sonrisa.

Cuando ya tenemos el quipo, queremos hacer un proyecto y lo he dotado de positividad para poder llevarlo a la práctica, ahora tengo que hacer que todo el centro sea mi equipo para que podamos llevarlo a cabo todos juntos. “El centro como un equipo”:

-  El centro como un equipo total.
- Sumar esfuerzos. Sin la suma de estos esfuerzos no lo vamos a conseguir.
- Permitir desarrollos personales. Si doy las ideas ya elaboradas no permito que nadie pueda añadir cosas que van a ser muy importantes. Volvemos a que hay que ser el primero y el último.
- Compartir, no repartir. No se trata de que cada uno haga un trozo y luego lo juntemos, porque así no hemos participado de las cosas de los otros, pero sí que hay que organizarse para que uno no lo tenga que hacer todo, sino que lo que cada uno hace, sirva.
- Respetar la diversidad y las diferencias. No puedo pretender que en un proyecto todos se impliquen de la misma manera y que participen igual.
- Cooperación y respeto. Si todos cooperamos y nos respetamos es más fácil que el proyecto salga adelante.
-  Aprovechar las potencialidades, incluso las negativas. A todos vas a poder darles algo que hacer para aprovechar esas potencialidades.
- Hacerlos participes. Ver de qué manera para que se sientan útiles.
- Integrar. Integrar a todos los miembros de la comunidad. Todos tienen que saber que son importantes.


Pero si yo quiero que el centro se considere un quipo, tiene que tener “un fin común”:
  •           Trabajar para un objetivo común, con procedimientos y metodología común. Si todos los años buscamos un proyecto común, nuestro, hacemos que toda la comunidad educativa se una.
  •           No es trabajar con, junto y para.
  •           Sentir el objetivo común.
  •           Implicar a toda la comunidad.
  •           Dar directrices, borradores; facilitar, pero permitir iniciativas y creatividad.

Cuando ya tengo mi quipo, un proyecto, quiero hacer cosas, estoy implicando a todos… lo más importante para que pueda fluir y se pueda llegar a esa cooperación es la comunicación, acompañada con armonía y con respeto.  Hay que ganarse la atención de la gente dándoles algo que les interese. Además hay que aprender de las cosas que no funcionan, no podemos estar repitiendo los errores una y otra vez. Escuchar siempre antes de actuar.  No tomar nunca una decisión inmediata porque es muy probable equivocarse; cuando las cosas se dejan reposar se ven con otra perspectiva. Es muy importante oír varias versiones distintas porque eso te da una visión más amplia y concreta de la realidad. Hay que prepararse lo que queremos comunicar, y hacerlo siempre en positivo; las cosas dichas de forma positiva predisponen de forma positiva a las personas. Conocer el valor de las palabras es muy importante; una palabra puede hacer mucho daño, además los niños son muy influenciables y no se pueden decir delante suyo cosas negativas; hay que hacerle ver cualquier pequeño progreso. Hay que enjuiciar a las tareas, no a las personas; cuando algo no sale bien, se enjuicia la acción, la cuestión laboral, no la persona; preguntarse qué ha salido mal, no quién. Tener interés por cada alumno, que todos se sientan parte de lo que estamos queriendo hacer. Y buscar alternativas y soluciones; que no nos centremos en los problemas, sino que nos esforcemos por buscar la solución. “No tener la angustia del problema, sino la esperanza de la solución”.

Como ya tenemos un quipo y un objetivo común, vamos a hacer que todos se sientan necesarios. Hacerles ver que todo lo que aportan es importante y se tiene en cuenta. Para ellos hay que darle mucha importancia a las reuniones de coordinación pedagógica y de los ciclos y a los organigramas, donde se encuentran desde las cocineras y limpiadoras hasta la junta directiva. “Proponer cosas, darlas para que se debatan, consensuar, decidir y organizar cómo llevarlo a cabo”.

La formación permanente de los profesores es muy importante y  aquí el papel del director es fundamental como motor impulsor, para que esto se lleve a cabo e intentar potenciar dentro del propio centro diversos cursos. Los proyectos de formación en centro son garantía de renovación porque los profesores van a aprender cosas nuevas que los van a ayudar a innovar y además va a hacer que se produzcan muchos momentos de unión y de participación. Las críticas tienen que ser constructivas, es muy importante hacer auto críticas.

A modo de conclusión, podría decir muchas cosas, pero sólo serviría para repetir lo que ya ha dicho Dori. Todo está escrito de forma narrativa, contando “lo que ella dijo”, pero porque fue ella quien dio la charla, y por tanto, quien nos hizo pensar en todo ello, pero ciertamente, pienso como ella en la mayoría (si no en todos) de los aspectos y es por eso por lo que no añado más opinión mía.

Me ha gustado que nos haya hecho ver que la innovación no es sólo usar ordenadores, a pesar de que son centro piloto de página web y centro piloto de ordenadores táctiles en las aulas de infantil; también me ha gustado mucho que le haya dado tanta importancia a la ilusión, a la sonrisa, a la amabilidad, al trabajo en equipo… emociones tan humanas y que desmitifican que los directores no están al mismo nivel que los profesores, que no piensan en ellos, y que le dan una calidez especial al centro y al grupo que trabaja en él.

En cambio, no me ha gustado que se haya centrado tanto en la dirección porque nos hubiese venido mejor una experiencia más cercana a la nuestra cuando salgamos para trabajar, que no será esa, claramente. Pero como en la vida todo es mejorar y seguir hacia delante, no nos ha venido mal porque muchas cosas se pueden extrapolar a nuestros grupos de trabajo, al grupo del aula… etc, y para cuando algún día cuando seamos directoras, nos acordemos de todo lo que nos ha enseñado aquí, que me parece muy importante.

domingo, 11 de marzo de 2012

charla 1

“Ser innovador es estar aprendiendo siempre. En ese sentido,
tenemos que ser lo más innovadores posibles”. Mº Carmen Devesa Zamora.

Mº Carmen es profesora de 6º de primaria y lleva 4 años con los mismos alumnos, llevando a cabo su proyecto. No era una experta en informática, pero a partir de la incorporación de la tecnología en sus aulas y de algunos tutoriales, decidió investigar por su cuenta y ponerse al día en la materia.

Esto es muy importante tenerlo en cuenta y aplicárnoslo a nosotros mismos. No tenemos que ser informáticos para aventurarnos en algún proyecto de ese tipo, y mucho menos, esa no puede ser una escusa para no reciclarnos y no unirnos a las nuevas formas de educar. Gracias a la ayuda de las redes sociales, ahora el claustro está en la red. Puedes encontrar colaboración más allá de las paredes del centro.

Empezó la charla diciendo que, a la hora de cambiar cosas, tienes que hacerte preguntas. Tenemos que autoevaluarnos a nosotros mismos también para ver cómo estás trabajando, si está funcionando, si es eficaz, si queremos alumnos competentes, cómo lo podemos lograr… Para hacerte esta evaluación tienes que partir de si quieres ser una maestra que transmite los conocimientos como antiguamente o si lo que quieres es guiar a los alumnos para que ellos mismos adquieran los conocimientos. Espero que con todas las veces que nos lo han repetido en los dos años que llevamos, todos sepáis la respuesta… jeje

Por tanto, con este planteamiento, no podemos enseñar a los niños con metodologías tradicionales del siglo pasado. Hay que renovarse. A día de hoy ya no tienen sentido “leer, subrayar y examinar”. Todos estos cambios que se plantean son siempre en mejora de que los alumnos aprendan de forma real.

Cuando ya tienes claro que lo que quieres es tener alumnos competentes capaces de llegar al conocimiento por ellos mismos y que para ello tienes que usar metodologías nuevas y ser profesores transmisores, que orienten y guíen el proceso, tenemos que tener muy en cuenta la competencia de aprender a aprender. Aprender no acaba en la escuela, sino que hay que estar aprendiendo durante toda la vida. Al igual que antes, también esto lo hemos escuchado muchas veces estos años, pero nunca está de más repetirlo una vez más para los olvidadizos o los que todavía no se han convencido. Hay que estar en constante renovación, no podemos conformarnos con lo que nos enseñaron un día en la universidad y estar 50 años aplicando las mismas prácticas.

Precisamente el otro día tuve una “discusión” con mi tía, porque no entendía que los profesores no tuviésemos que hacer un examen todos los años, y el que no aprobara, a la calle; con mis insuficientes conocimientos, intenté explicarle esto precisamente, que no necesitamos evaluaciones de esta clase porque los buenos maestros están constantemente evaluándose a sí mismos, retándose por aprender cosas nuevas, etc. Por desgracia, no conseguí que lo comprendiera. Espero que todos vosotros me ayudéis a que con el ejemplo, algún día podamos demostrárselo.

Siguiendo con la charla, algo que nos han intentado hacer ver desde el primer momento es que innovación no es cambiar la apariencia del aula. No estoy innovando nada si tengo un aula llena de ordenadores de último modelo, la pizarra digital, etc., pero sigo usando la misma metodología rígida de antes. La clave está en la metodología. Las Tics nos lo ponen fácil porque hay muchos recursos; se trata de buscar lo que necesitamos para una finalidad concreta. No por usar más herramientas estás innovando más. Herramientas concretas para necesidades y usos concretos

Para aprender las cosas hay que ponerse a hacerlas. Esa es la mentalidad que tenemos que tener si queremos participar en la innovación educativa. No podemos tener miedo o innovarnos mucho, pero sólo en la teoría.

Por tanto, teniendo todo eso claro, Mº Carmen “se tiró a la piscina” y empezó su proyecto. Lo que hace es que no usa libro de texto, sino proyectos de trabajo usando las WebQuest, la caza del tesoro, participan en proyectos colaborativos con otros centros a través de la red…

El método de trabajo empieza planteando el tema a trabajar. Comienzan con las ideas previas que tienen sobre el tema, hacen un mapa conceptual, se reparten tareas y se ponen a trabajar en la página de la WebQuest, investigando en enlaces preparados por la profesora. Cuando ya tienen su parte hecha, hacen una presentación y les explican el tema a sus compañeros. La forma de evaluarlos es mediante un dosier que hacen ellos mismos y que le tienen que entregar al final del tema trabajado.

Trabajar de esta forma tiene grandes dificultades porque es muy difícil conseguir los recursos informáticos (ordenadores, etc.) y también requiere un nivel de implicación muy alto (te conviertes en maestra 24 horas).

Con esta forma de dar clase, la atención a la diversidad y la inclusión se concentra y multiplica, porque existen muchos más recursos para adaptarse a estos niños con dificultades de cualquier tipo.

Algo que para mí es muy importante que dijo Mº Carmen es que usar las Tics en clase no quiere decir que todo tenga que estar planeado en torno a ellas. Hay que alternar con el trabajo en la libreta, los manuales, etc. Volvemos a repetir lo de “Herramientas concretas para necesidades y usos concretos”.

sábado, 3 de marzo de 2012

Práctica escuelas cooperativas

Escuela cooperativa “PEQUE-MUNDO”

  10 PRINCIPIOS GENERALES – IDEARIO DE LA ESCUELA

1)      Fomento de la igualdad.
2)      Coeducación de los sexos.
3)      Diversidad y multiculturalidad.
4)      Colaboración e implicación de los padres.
5)      Desarrollo integral del alumno.
6)      Aprendizajes significativos.
7)      Constructivismo como base de la educación.
8)      Inicio en las TICs.
9)      Bilingüismo.
10)   Respeto por el medio ambiente.

  5 RELATIVOS A LOS PADRES

1)      Comunicación bidireccional entre padres y profesores.
2)      Implicación directa.
3)      Cursos orientativos y de ayuda.
4)      Cooperación con el centro.
5)      Tutorías.

  5 RELATIVOS A LOS ALUMNOS

1)      Potenciar la autonomía e individualidad.
2)      Procurar aprendizajes significativos.
3)      Interacción con el medio.
4)      Aprendizajes individualizados.
5)      Programas de inserción escolar.

Escuelas cooperativas


Después del vídeo de Ken Robinson se habló de las llamadas escuelas cooperativas. Este tipo de escuela consiste en que los profesores (y a veces, también los padres) tienen en propiedad la escuela y la organizan según sus propios criterios.

Lo único que se les establece a estas escuelas para ser reconocidas es el currículum de referencia. Los niños tienen que alcanzar los mismos objetivos y competencia marcados por la Ley que en cualquier otro colegio.

A pesar de que este tema surge a partir del vídeo de Robinson al hilo de la innovación, estas escuelas surgen realmente en los años 70, cuando se termina el régimen totalitario de Franco. Las primeras escuelas que surgen de este tipo tienen todas un mismo patrón, pero con el tiempo ya no se asocian a ningún modelo concreto porque cada una tiene unas características específicas.

Actualmente existen unas 110 escuelas cooperativas en España (y al parecer, muchas de ellas se concentran en la región de Murcia)

He de decir que en Internet, salvo las propias escuelas cooperativas que tienen blogs o páginas webs, está muy mal porque no hay demasiada información al respecto. Hay que saber dónde buscar concretamente para obtener resultados; por suerte, yo he sabido ;)

Aquí os dejo el enlace a la página de UECOE, que es la Unión Española de Cooperativas de Enseñanza. Tienen toda la información que no he logrado encontrar en ningún otro sitio. La verdad es que está muy bien, os recomiendo que le echéis un vistazo.

  
Para dar con ella he tenido que hacer un periplo interesante partiendo del Power de Alicia, que al copiar en Google la frase literal que ponía, me ha llevado a un artículo que mencionaba un congreso de la UECOE y de ahí por fin he logrado encontrar lo que buscaba. Esto os lo explico para que sepáis que buscar en internet es un arte y hay que tener paciencia. Lo digo a título de consejo personal, no con ánimo de tirarme flores.
  
A partir de este Alicia nos ha propuesto por grupos formar nuestra propia cooperativa educativa. Yo no estuve en clase ese día, por lo que he tenido que hacerlo sola. Para ello hemos tenido que pensar:

  •  10 PRINCIPIOS GENERALES – IDEARIO DE LA ESCUELA
  •  5 RELATIVOS A LOS ALUMNOS
  •   5 RELATIVOS A LOS PADRES


viernes, 2 de marzo de 2012

comentario sobre el vídeo de Ken Robinson



Empieza hablando de una segunda crisis climática tan urgente como la primera, que no se refiere a los recursos naturales, sino a los recursos humanos, debido al pobre uso que hacemos de nuestros talentos.

Hay muchas personas que simplemente dejan pasar la vida. No disfrutan con ella, no disfrutan con lo que hacen, simplemente esperan que llegue mañana, y mañana que llegue pasado, y así siempre. Luego hay una minoría de personas que aman lo que hacen y que no se imaginan haciendo otra cosa, forma parte de su ser, de su persona.

Yo espero poder ser de este reducido grupo de privilegiados, porque hoy día no me imagino haciendo otra cosa que no sea estar en un colegio y, sinceramente, creo que la vida no merece la pena si no la vives así, disfrutando de lo que te gusta. Además, pertenecer al otro grupo de personas implicaría que no sólo yo viviría odiando lo que hago, sino que los demás también lo odiarían y en una profesión como la educación, no te puedes permitir ser la causa de que alguien odie aprender, porque te convertirías indirectamente, en una gran piedra en su camino en la que tropezaría constantemente.

Hay diferentes explicaciones para esto. La principal es la educación, que en la mayoría de casos, aleja a la gente de sus talentos naturales (como ya vimos en el video anterior de Ken Robinson con el tema de que en la escuela se fomentan unas asignaturas y unos tipos de enseñanzas y se pierden otros). La educación tiene que crear las circunstancias para que los niños puedan desarrollar estos talentos por sí mismos, pero por lo general, no es así.

Las reformas educativas actualmente no tienen sentido, porque están reformando un modelo que no vale. “No necesitamos una evolución de la educación, sino una revolución”; hay que cambiarla completamente, transformarla.

Uno de los principales cambios que se tienen que producir es la innovación educativa, que es muy difícil porque significa hacer cosas, trabajar por cambiar lo que ya damos por hecho. Hay que cambiar la mentalidad de “no se pueden hacer de otra manera porque así es como deben hacerse”… Se nos presentan situaciones nuevas y por tanto, tenemos que actuar de forma nueva, pensar de forma nueva. (Es lo que tantas veces hemos repetido en clase sobre enseñar a los niños el futuro con herramientas de pasado).

“Debemos desencantarnos” con lo que damos por sentado. Muchos de nuestros pensamientos se crearon para hacer frente a situaciones pasadas, no para las circunstancias actuales, que son distintas, nuevas… por tanto, hay que innovar, cambiar. Como con el ejemplo que pone del reloj, seguimos usando muchas cosas inútiles por el mero hecho de que ha sido así siempre, pero eso no quiere decir que no haya cosas mejores.

¿Por qué en algunas ciencias nunca dejan de plantearse cómo cambiar para hacerlo aunque solo sea un poquito mejor, y en cambio, una ciencia tan importante como la educación, se empeña en seguir con herramientas (y con herramientas me refiero tanto al sistema, como a los métodos, los profesores…) obsoletas y que no funcionan? Yo, personalmente, preferiría que se me pudriese la boca antes que ir al dentista en las condiciones que tantas veces me ha contado mi madre que tuvo que experimentar ella y que tanto miedo le producen ahora. De la misma manera, muchas personas prefieren “pudrir” su cerebro antes que llenarlo de cosas que les van a producir aburrimiento, desmotivación…

Una de las ideas que tenemos tan arraigadas en educación es la linealidad. La vida no es lineal, es orgánica, se crea en simbiosis unos con otros y con las circunstancias y el entorno que nos rodean. Pero aún así estamos obsesionados con seguir una línea, terminar en la universidad… (Aunque es cierto que cada día las diferentes formaciones son más entendidas y aceptadas por los jóvenes, los adultos siguen teniendo la idea fija en la cabeza de que no eres nadie si no vas a la universidad, que tu futuro no puede ser bueno si nos has pasado por ella; Para ellos, los módulos, las formaciones profesionales, etc., no son opciones que se puedan ni tan solo plantear). Las comunidades humanas dependen de la diversidad de talentos, no de la actual concepción única de la capacidad y de la inteligencia. Es muy importante reconstruir estos conceptos. Hay capacidades muy distintas y formas muy diversas de usar la inteligencia. De igual modo, llegar a la universidad o a las metas que actualmente se plantean como necesarias, no implican grandes aptitudes o inteligencia. Alguien “tonto” en cierta rama de conocimientos, puede llegar perfectamente a la universidad a base de “machacar” la materia (aunque eso no le sirva para nada).

Otro gran problema es la conformidad. Los sistemas educativos están basados en modelos estandarizados y no se adaptan a las circunstancias particulares de los alumnos y esto está empobreciéndonos. El ser humano es completamente diverso, todos tenemos aptitudes diferentes. Aunque a todos se nos dé lo mismo en el mismo momento, no somos iguales y no reaccionamos de la misma manera. Por eso, no podemos conformarnos con lo que se nos da, hay que buscar nuestra mejora.

Cuando hacemos las cosas porque nos gustan, con pasión, entusiasmo, interés… somos buenísimos en ello. El tiempo que tardemos en conseguirlo cambia completamente; deja de medirse con el tiempo del reloj; la medida del tiempo deja de importar porque si te gusta, el tiempo pasa rápidamente, mientras que si no te gusta, se eterniza. Esta es una de las principales causas de abandono escolar, que no responden a las necesidades de los alumnos, que no  sacian sus inquietudes, sino que les imponen otras que a ellos no les interesan nada.

Como ejemplifica Robinson, tenemos que pasar de un modelo de educación mecánico a uno de agricultura, que reconozca el florecimiento humano, que es un proceso orgánico y que no se puede predecir ni preestablecer su desarrollo ni sus metas. Lo único que puedes hacer es crear las condiciones para que ellos maduren.

La solución es la personalización de la educación, un modelo que responda a las circunstancias del momento, que dé respuestas para el futuro. Las tecnologías combinadas con el buen funcionamiento y actuación de los profesores, son una gran oportunidad para revolucionar la educación.

A modo de conclusión sobre el vídeo y un poco como opinión-reflexión personal, sólo me queda decir que nada de lo que se dice en este vídeo es nuevo. Llevamos ya casi dos años escuchándolo de mil formas distintas. Ahora queda ser realmente consciente de lo que significa y, especialmente, saber llevarlo a la práctica.

Formación permanente

La formación permanente es imprescindible para los profesionales, especialmente para los maestros, porque tenemos que formar personas y no podemos hacer que se enfrenten a las cosas del mañana con las herramientas de ayer. Tenemos que estar constantemente renovados y al día porque, además, cuanto más sepamos nosotros más podemos enseñar a los alumnos.

Esta formación permanente es tan importante que se tiene en cuenta y se valora para casi cualquier cosa referida al ámbito laboral. Se le da mucho valor, por ejemplo, a la hora de los accesos a puestos de trabajo, se cuantifica en los accesos a oposiciones o para obtener los sexenios, etc.

El tema de la formación permanente es el único que rompe la regla de “la avaricia rompe el saco”. En este caso, cuanto más mejor, nada de lo que hagamos va a estar de más o nos va a sobrar.

Pero también hay que tener ojo. Sí es cierto que todo lo que hagamos nos va a servir para crecer personalmente, pero no todos los cursos nos van a servir para sumar puntos en ciertos momentos, como los que hemos dicho de la oposición o el acceso a la bolsa, etc. Puesto que esa formación es necesaria, mejor enfocar esa formación hacia cosas que nos puedan servir para acumular puntuaciones. Los criterios básicos que tenemos que tener en cuenta a la hora de hacer un curso, si queremos que nos sirva para puntuar, son:

  •           Que el curso sea superior a 20 horas.
  •           Que esté homologado o certificado por el Ministerio, la Generalitat o similares.

Esto no quiere decir que porque un curso no esté homologado o sea inferior a 20 horas, no lo hagamos. No. Si a ti te encanta la botánica y hay un curso, pero no cumple estas características, ¡hazlo! Nunca estará de más.

Dependiendo de dónde estés trabajando (hay que estar trabajando o en bolsa para poder acceder a estos cursos), tenemos distintas formas de conseguir esa formación permanente:

Si estás trabajando en una ESCUELA PRIVADA, no depende ni del Ministerio, ni de la Consellería, ni de ninguna entidad de este tipo. Los centros privados suelen encargarse personalmente de la formación de sus trabajadores y suelen hacer sus propios cursos.

Si estás en una ESCUELA PÚBLICA o CONCERTADA, esta formación la organiza el Ministerio (MEC), aunque cede competencias a las Consellerías de cada provincia.

                1º) El MEC ofrece formación permanente;

                       MECàPROFESORADOàFORMACIÓNàFORMACIÓNPERMANENTE
                       MECàPROFESORADOàRECURSOS PARA PROFESORESàITE

El ITE (Inst. tecnologías educativas) pertenece al ministerio y nace con el objetivo de ser el referente de toda la formación permanente en cuanto a tecnología. La propiedad intelectual de todos los cursos del ITE se traducen en recursos compartidos, es decir, ellos te forman ofreciéndote los cursos y tú compartes lo que has aprendido, colgando en su página los recursos que has creado, etc.

                2º) La Consellería: Pasamos de la organización general en Madrid del Ministerio a la de cada provincia.


En esta página el recurso más importante es el CEFIRE, que es el sitio donde hay que acudir si quieres seguir haciendo cosas, seguir formándote, además de dar clases. Pretende ser una sede para reunir a los profesores y ser un banco de recursos y de oferta formativa.

Dentro del CEFIRE están los asesores y las asesorías. Se trata de profesores que durante cuatro años se proponen para trabajar ahí, presentando algún proyecto y se dedican a crear y ofrecer cursos, proyectos, etc. Como en el ITE, los recursos que se crean en estos cursos pasan a formar parte de los recursos del CEFIRE.

Durante el mes de Julio, la oferta de cursos, etc. se multiplica, porque se supone que es un mes de formación para los profesores y no de vacaciones, aunque actualmente esa idea se ha perdido casi del todo.

Dentro de Consellería, existe la pestaña “convocatoriasà otras ayudas. Ahora están estancadas por la crisis, pero algunas de ellas son:
  • Ayudas individuales: Te devuelven parte o el total del dinero que te gastas en tu formación permanente. Por ejemplo, si te vas a Londres a hacer un curso que has tenido que pagar, presentas los correspondientes justificantes y te devuelven ese dinero invertido.
  •  Programas de lenguas; PIALE: Un programa europeo que consta de dos fases. La primera es un período de clases en la escuela de idiomas y el segundo es una estancia en algún país con lengua inglesa para que practiques. Hay niveles hasta el B2.


                3º) Sindicatos: Los más importantes para nosotros son: STEPV/ UGT-ENSENYAMENT/ CSI-F/ CC.OO-ENSENYAMENT PV.

  1. STEPV: Es el primero y el más importante porque es exclusivamente dedicado a los trabajadores de la enseñanza.
  2. UGT-ENSENYAMENT: ``Federación de trabajadores de la Enseñanza´´
  3. CSI-F: ``Central sindical Independiente y de funciones.´´
  4.  CC.OO-ENSENYAMENT PV: ``Comisiones obreras, Federación de enseñanza.´´